Pedro H. Tavosnanska
In Memoriam
Nuestro Eduardo Galeano, patriota latinoamericano (nacido en Uruguay) contó en uno de sus relatos que "Un hombre del pueblo de Neguá, en la costa de Colombia, pudo subir al alto cielo. A la vuelta contó. Dijo que había contemplado desde arriba, la vida humana. Y dijo que somos un mar de fueguitos. -El mundo es eso -reveló- un montón de gente, un mar de fueguitos. Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás. No hay dos fuegos iguales. Hay fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores. Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, y gente de fuego loco que llena el aire de chispas. Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros arden la vida con tanta pasión que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca se enciende".
Pedro Tavosnanska ha sido uno de esos fuegos que han ardido con pasión. Su compromiso de dio el calor necesario para sostener el Foro por casi dos décadas y fidelizar los principios de Democratización, cooperación internacional e integración regional del deporte, la educación física, la actividad física, los juegos indígenas y la recreación para toda nuestra Patria Grande. Fácilmente se lo puede catalogar como uno de los imprescindibles. Su partida provoca un vacío que invita a que con idéntica responsabilidad se tome la posta de su tarea. A su vez invita y desafía al trasvasamiento generacional en pos de los ideales irrenunciables que han recorrido nuestra toda nuestra querida Latinoamérica
